
La oscura cabellera despeinada en caóticos remolinos y el mismo pijama de anteayer en una postura poliforme en la silla del antiguo despacho de mi padre. Las gafas apoyadas en el filo de la nariz se asoman con vértigo al montón de folios en aparente desorden esparcidos en mi escritorio, y la cálida luz del día se disipa en el tiempo convirtiéndose en el parpadeo eléctrico de una bombilla pendida del suelo del piso de arriba. Frustración y Cansancio bailan sobre las páginas, cada vez más lentamente, al son de un suave vals ligero como las nubes que cruzan el cielo en primavera, azul como la luz que sobre la superficie del agua refleja en verano miles de destellos, escucha:…ghfffffffffff… ghfffffffff … ghfffffffff , son las olas que en la orilla mueren y espuma se convierten en un intento de fundirse con la brisa y con la arena salada de la playa, el sol se hunde en el horizonte, y en el cielo las estrellas parpadean junto a la luna ahora dibujada en la ventana de mi habitación.
…¡que me duermo y mañana tengo examen!